NACÍ EN LA CIUDAD MÁS LINDA.

“Nací en la ciudad más linda que está en el norte de mi país, doy gracias a mis padres que me dieron la vida ahí”, dice una canción que canta Lucha Villa, pero que es lo que hace linda a una ciudad ¿Sus calles? ¿Sus edificios? ¿Lugares turísticos? ¿O qué?

En la entrada de la ciudad dice con orgullo: “Cuna de Artistas” ¿Qué es lo que hace que una persona nacida en este lugar puede brillar por dotes artísticas? Y en otros campos también, hay muchos otros que sobre salen en otras áreas, como el deporte, algunos están en puestos importantes de servicio público, hay empresarios distinguidos y con visión. También se distingue esta ciudad linda por la vocaciones sacerdotales, hasta ahora somos de la ciudad que más sacerdotes ha dado a la diócesis.

En el primer día de nuestro novenario de preparación para la fiesta de nuestra Santa Patrona escuchábamos, en la misa, la 1 Carta del Apóstol San Pablo a los Tesalonicenses que nos dice: “Ante Dios, nuestro Padre, recordamos sin cesar las obras que manifiestan la fe de ustedes, los trabajos fatigosos que ha emprendido su amor y la perseverancia que les da su esperanza en Jesucristo, nuestro Señor…Su fe en Dios ha llegado a ser conocida, no sólo en Macedonia y Acaya, sino en todas partes; de tal manera, que nosotros ya no teníamos que decir nada” (1 Tes 1,1-5 ss) Y este sería como un objetivo, que de esta ciudad linda se hablara de verdad en otros lugares cosas positivas. Pero la triste realidad es que hoy decir que somos de esta ciudad linda, te señala. Este triste que más que de cosas positivas, se habla de cosas negativas.

¿Qué se podría hacer para cambiar, no solamente una imagen, sino una realidad, un ambiente? Esta fiesta Patronal nos une como una familia. Personas que tenemos un anhelo de una ciudad en Paz, con progreso, que todos tengamos lo necesario para salir adelante en todos los sentidos, de buena convivencia entre nosotros.

Es un tiempo para retomar los valores que no cambian: El respeto, la solidaridad, la amistad, la  unidad, el trabajo. Y claro que no podemos pasar por alto, tener una religiosidad, con una espiritualidad firme, dejar que Dios entre en nuestras vidas, darle la oportunidad de con su inspiración y guía poder tener en verdad una ciudad más linda, por las personas que lo habitan y además por su ambiente. Quizás para algunos esto es ingenuidad o un sueño imposible, pero para los hombres puede ser imposible, pero no para Dios.

Que esta fiesta Patronal nos haga anhelar un mundo mejor. ¡¡¡¡¡ Feliz Fiesta Patronal!!!

SANTA ROSALIA:  RUEGA POR NOSOTROS.

Que el Señor sea su Fuerza y su Paz

Pbro. Carlos Felipe Lozano Lara