MENSAJE DE CUARESMA 2012

Mensaje al Pueblo de Dios, 

que peregrina en las parroquias que conformamos los decanatos de: Santa Rosalía, San Isidro y Santa Cruz,

 y a todas las personas de buena voluntad que buscan la paz.

“La paz este con ustedes” (Jn 20,19)

Nosotros los sacerdotes de estos decanatos, ante los constantes actos violentos causados por la inseguridad y el crimen organizado, palpamos muy de cerca el dolor del pueblo de Dios. Por lo que invitamos a nuestras comunidades a que este tiempo de cuaresma, que la Iglesia nos ofrece, sea un tiempo favorable para la conversión.

Proclamamos que Jesucristo: “camino, verdad y vida” (cf. Jn 14,6), es la única solución para implantar en nuestros pueblos la paz verdadera. 

Hacemos un llamado a toda la comunidad a llevar un proceso serio de conversión y vivamos como verdaderos hijos de Dios, lo hacemos iluminados por la Exhortación Pastoral de los obispos de México titulada: “Que en Cristo nuestra Paz, México tenga una vida digna”, que nos ofrecieron en el año 2010. 

Esta invitación la hacemos: A todos nosotros los bautizados (sacerdotes y laicos), para que recibamos con sinceridad el llamado de Jesús: “Arrepiéntanse y crean en el evangelio” (Mc 1,15) y vivamos intensamente el seguimiento de Jesús, “Modelo perfecto de cómo se vive la vida” (EPEM 145).   

A todos los fieles laicos, les recordamos que “están llamados, a comprometerse como ciudadanos y participar activamente en los procesos y movimientos de la vida social, política, económica y cultural, aportando en ellos su testimonio de vida y su competencia profesional para la vida digna y pacífica de sus familias y comunidades. (cf EPEM 151). Ante los próximos comicios electorales les exhortamos a emitir un voto responsable y razonado.

A los padres de familia, para que animados con el ejemplo de la santísima Virgen María y su esposo san José sean para sus hijos, verdaderos modelos de vida y defensores de la misma desde su comienzo. “Les llamamos a fortalecer la vida familiar, y les pedimos que sean para sus hijos reflejo del amor y del perdón de Dios, haciendo todos los esfuerzos por integrar una familia unida y solidaria y por participar en la vida comunitaria, construyendo, con todas las personas cercanas, condiciones de paz para la vida digna de los mexicanos.” (cf. EPEM 247)

A los adolescentes y jóvenes, los animamos a que no se dejen seducir por estos ambientes que nos presentan una falsa felicidad, sino que luchen por forjar en su vidas valores sólidos basados en el respeto, la verdad y la justicia… “Aprendan el lenguaje de la paz, respondan a la violencia con acciones de paz, para construir un mundo reconciliado y rico en humanidad.” (EPEM 249)

A nuestros gobernantes, les recordamos que a ustedes está confiada la tutela suprema del Estado de Derecho en México. Sabemos que cumplir la alta misión que el pueblo les ha encomendado no es fácil en estas circunstancias; sin embargo, es una de sus tareas prioritarias (EPEM 240).

A todos los que, por cualquier razón, se han involucrado en las diversas formas de crimen organizado. Dios los llama a la conversión y su perdón está siempre dispuesto, pero deben arrepentirse. 

A quienes producen la droga y la transportan, a los que se prestan al comercio del narcomenudeo, a los que la consumen, a los sicarios y a todos los implicados en este nefasto negocio: ¡arrepiéntanse y cambien de vida! Busquen la vida y no la muerte. Dios está siempre dispuesto a perdonarles; sólo les pide que reconozcan sus errores; que se arrepientan de ellos y no lo ofendan más agraviando a sus hijos; que reparen los daños y se retiren de esta actividad de muerte (cf. EPEM 255-256).

Nosotros unidos a la Iglesia Universal invitamos a nuestros fieles a:

La oración: que abra nuestros corazones, a la escucha de la palabra de Dios.

La penitencia: que impulse a merecer el perdón y la misericordia nuestro Padre y Creador.

La caridad: en la práctica de las obras de misericordia, que ayuden a impulsar caminos de unidad con Cristo y nuestros hermanos. 

Los ejercicios espirituales de esta cuaresma: para que “la evangelización transforme desde la raíz a las personas y sean fermento de la paz en el mundo.” (cf. EPEM 252).

En cada uno de nuestros templos y comunidades parroquiales, estaremos viviendo estas prácticas propias de vida cristiana. Quiera Dios nos ayuden a lograr una auténtica conversión y por intercesión maternal de Santa María de Guadalupe, logremos reconocernos hermanos y vivir en fraternidad (cf. 258).

DECANATO SANTA ROSALÍA: San José, Santa Rosalía, San Isidro, Nuestra Sra. de Guadalupe (Camargo), Nuestra Sra. de Guadalupe (La Perla), Nuestra Sra. del Refugio (La Cruz).

DECANTO SAN ISIDRO: San Juan Diego, San Martín, Nuestra Sra. del Carmen, Cristo Rey, Nuestra Sra. de Guadalupe (Delicias), San Isidro (Las Varas). San Marcos (Saucillo), Nuestra Sra. de Guadalupe (Naica).

DECANATO SANTA CRUZ: San Antonio de Padua (Jumiles), Santa Cruz (Rosales), Inmaculada Concepción (Lázaro Cárdenas), San Pablo Ap. (Meoqui).

Cuaresma 2012