AÑO NUEVO

No sé si han dado cuenta que la primera solemnidad que celebramos en el comienzo del años civil es de María, varias veces me he preguntado, ¿por qué no iniciamos con una celebración de Nuestro Señor Jesucristo?, es un momento propicio para celebrarlo pues estamos en navidad, pero no lo hacemos así. Me llama la atención una frase de una autora que se llama Megan McKenna en el libro El Adviento y la Navidad, día a día: “En este primer día del año celebramos a María, la mujer que entra y sale silenciosa, discreta y mansamente, pero con fuerza. Este tiempo habla de idas y venidas, de finales y comienzos, de sueños y del coraje inmenso que se necesita para hacer que los sueños de Dios se realicen en un mundo que se ha alejando de tales esperanzas para la comunidad humana”. Cuando María visita Isabel esta última dice una expresión que encierra la actitud y fuerza de María: “Dichosa tu que has creído porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor…” La actitud de comienzo en este año y en todo proyecto de vida es creer que se cumplirá, no podemos comenzar la actitud de incertidumbre y desconfianza de si el proyecto se cumplirá o si lo podre llevar a feliz término, eso es como abortar antes de iniciar, María nos enseña a como tener el coraje, para llevar a cabo, no sólo lo que ella se propone, sino lo que se propone el Señor. María también tiene una actitud importante, contemplar y guardar las cosas en su corazón; contemplar es más que mirar, es más que anonadarme, es más que admirar, es ir a la esencia de lo que esta sucediendo, es mirar a través de los acontecimientos una mano que permanece oculta, pero presente no pude pasar desapercibida, pero sobre todo hay que ser firme y constante, porque perdiendo el paso lo pierdo todo, es decir la contemplación tiene que ser en todo momento, no sólo en la alegría no sólo en la tristeza, sino en cada momento aún cuando no pase nada, es la actitud permanente del que no puede dejar pasar ni un mínimo detalle, hay que ser constante. Estas dos actitudes la necesitamos para caminar, como dice por ahí una frase: “Creo en el Sol, aun cuando no brilla, creo en el amor, aun cuando no se muestra; creo en Dios, aun cuando no habla.” “La fe nos da valor para enfrentarnos al presente con confianza y al futuro con esperanza.” (Destellos de Vida de Hedwing Lewis) Dice el monje Thomas Merton: “La inconstancia y la indecisión son señales de amor propio. Si nunca puedes conformar tu mente a los que Dios quiere de ti, sino que pasas siempre de una opción a otra… de un método a otro, puede ser un indicio de que intentas sortear la voluntad de Dios y hacer lo que quieres con una conciencia tranquila. Mantente sosegado, y deja que Dios haga algo”. Además comenzamos también este año con un objetivo a alcanzar, para nuestro mundo la paz, pongamos todo nuestro esfuerzo para que no solamente oremos por que lleguemos a conseguirla sino que la construyamos día con día, con pequeños detalles y con la confianza en que podamos lograrla. Que el Señor sea su fuerza y su Paz. Pbro. Carlos Felipe Lozano Lara