NO MATARAS
Este es uno de los mandamientos que se ha violado con frecuencia, parece que para algunos esto no tiene importancia, porque lo ven desde el punto de vista religioso, algunos incluso afirman es un punto de vista de una religión o incluso de una confesión de fe, una ideología imposible de sostener en un mundo que proclama que el más fuerte es que sale adelante. Pero considero que no es sólo una confesión de fe o de ideología la que se sostiene. Es indispensable, llevarlo a cabo dicho mandamiento para poder convivir, es más para subsistir. En una ocasión leía por ahí un precepto que aparece también en el antiguo testamento: “ojo por ojo, diente por diente” y investigando porque se permitía esto encontré lo siguiente: Ley del Talión. El término ley del talión (latín: lex talionis) se refiere a un principio jurídico de justicia retributiva en el que la norma imponía un castigo que se identificaba con el crimen cometido. De esta manera, no sólo se habla de una pena equivalente, sino de una pena idéntica. La expresión más famosa de la ley del talión es "ojo por ojo, diente por diente" aparecida en el Éxodo veterotestamentario.
Históricamente, constituye el primer intento por establecer una proporcionalidad entre daño recibido en un crimen y daño producido en el castigo, siendo así el primer límite a la venganza.
En el Antiguo Testamento, más concretamente en la ley mosaica, la ley del talión aparece en Éxodo 21:23-25, en Levítico 24:18-20 y en Deuteronomio 19:21. Este principio seguirá vigente para el judaísmo hasta la época talmúdica donde los rabinos del momento determinaron que la pena se transformaría en un resarcimiento económico.
También el cristianismo lo deja sin efecto a raíz del Sermón del monte de Jesús de Nazaret (Mateo 5:38-39).
Pero también es cierto que este mandamiento, es un principio de conservación humana, no es tanto, una ideología política o religiosa a la que se aferra un gobernante o una religión en especial, si de hecho nosotros los humanos con el tiempo se han tenido que hacer organizaciones para conservar las especies en extinción imaginemos que tengamos que crear otra organización para conservar la especie humana, sería uno de los absurdos que cometeríamos.
Los de una misma manada no se matan, se conservan, los de una misma tribu se protegen de lo que los pone en peligro, pero no entre ellos, se protegen. Los hombres también deberíamos hacerlo.
No se necesitaría mucho tiempo para poder acabar con los hombres, recordemos cómo vivimos por mucho tiempo con esa preocupación, la llamada guerra fría en cualquier momento un hombre podría activar un artefacto y acabar no sólo con un país o una ciudad, sino con un mundo entero.
No esperemos a llegar a esos momentos, las guerras y la violencia tampoco tardarían mucho en acabar con mundo.
Que el Señor sea su fuerza y su paz.
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