LA GRAN MENTIRA, FELIZ PASCUA.

 


En esta octava de Pascua hemos estado escuchado textos que hablan de los momentos en lo que Jesús se presenta a los discípulos y como ellos tienen cierta resistencia, revuelto quizás, con admiración por lo que estaban viviendo. Y es que en verdad es algo fuera de serie y sorprendente que alguien pueda hacer esto, para empezar para los apóstoles era como un estar en un sueño, en cierto modo no querían correr el riesgo de estarse aferrando a querer ver un muerto vivo y por otro lado, caer en una especie de obsesión religiosas. Pero esta la inquietud siempre, los momentos de encuentro con Jesús son verdaderamente reconfortantes e incluso capacitadores para que los apóstoles y discípulos de Jesús salgan a predicar lo que han visto y oído. No van a ser los mismos hombres comienza el cambio radical en ellos, comenzara la gran aventura de ser pescadores de hombres, comienza a toda fuerza su apostolado, su trabajo impulsados por la acción del Espíritu Santo.

Pero ciertamente algo que a mi me surge como inquietud, que difícil sería para ellos mantener, una gran mentira como verdad, refiriéndome  en que en algún momento en los evangelios hay ciertos indicios de que pudo haber sido mentira, que los discípulos podían robar el cuerpo y después decir que había resucitado; sería absurdo, pienso, mantener esta gran mentira, ¿podría como mentira sostenerse tantos siglos? Ciertamente que no. Tenemos la certeza de que Jesús a resucitado, todo comienza a tener vida a tener, como luego decimos, color, razón, sentido, impulso. El empujón necesario  para seguir creciendo. Una mentira no puede sostener, esto que a través de los siglos sigue en pie, una mentira que al pasar de los tiempos se caería a pedazos. Ciertamente no tendría razón de ser,  que los apóstoles y algunos hombres y mujeres en la historia de la Iglesia, hayan entregado sus vidas por proclamar a un Jesús Resucitado, vivo. Sería absurdo pensar que alguien pueda consagrarse al servicio de alguien que no esta vivo, de poder gastar su vida en llevar el evangelio hasta los últimos lugares, la verdad es que no tendría un motivo seguro.

La gran Mentira en realidad es la Gran Verdad, Jesús esta vivo, esta presente en cada uno de nosotros y en nuestras comunidades. 


FELIZ PASCUA

Pbro. Carlos Felipe Lozano Lara

Comentarios

Entradas populares de este blog

UNA CREACIÓN DEL SEÑOR

DECÁLOGO DE UN BUEN SACERDOTE.